Traudl Junge fue secretaria privada de Adolf Hitler entre el otoño de 1942, hasta el colapso del régimen nazi a mediados de 1945. En el año 2001, luego de casi sesenta años de silencio, Junge decide compartir con el mundo su testimonio. Blind Spot: Hitler’s Secretary (traducido al español como La Secretaria de Hitler) es el trabajo documental de los directores André Heller y Othmar Schmiderer, quienes condensan en noventa minutos, diez horas de memorias de alguien que fuere testigo presencial de los últimos días de Hitler y el nazismo.Más que un documental, la película es una entrevista, por no decir un monólogo. La historia y el testimonio de la señora Junge sobrepasan con creces la cinematografía, que queda opacada por el peso de los hechos y la historia. La cámara fija, la historia lineal y la quietud absoluta del filme hacen un poco tediosa la propuesta a nivel visual. Sin embargo, La secretaria de Hitler resulta película obligada para aquellos que desean escuchar un relato asombroso, repleto de contrastes y detalles sobre la personalidad de Hitler y las circunstancias que giraron alrededor de su persona durante los días próximos a su caída. Junge, a quien siendo tan sólo una jovencita le tocó vivir en el propio ojo del huracán, murió de cáncer a los 81 años, horas antes de que la cinta fuera estrenada en el Festival Internacional de Cine de Berlín.
En este enlace podrán conseguir un extracto de la entrevista.
La cinta Venezolana
Anteayer pude ver The Bourne ultimatum, la tercera y supuesta última parte de la trilogía del espía Jason Bourne, interpretado por Matt Damon
Lo digo porque la manera en que la historia de Bourne termina no me dejó para nada satisfecho. Es floja, muy floja. Es una manera incompleta de completar algo. Se resuelve demasiado rápido y demasiado "fácil" en comparación con lo que ocurrió para llegar al punto climático de saber la verdad. Obviamente no puedo saltar a contarles el final de la película porque no sé si la han visto, pero sí les puedo decir que después de salir de la sala la sensación que tuve y que sigo teniendo, es que necesito -- es más, ¡exijo! -- que se haga una cuarta parte para que se le dé el fin que se merece a esta historia. También lo digo porque en el fondo, termina siendo más de lo mismo...
Uno de esos asesinos contra los que se entra a golpes Bourne es Paz, interpretado por el Venezolano Edgar Ramírez. Siendo completamente justo y objetivo, la participación de Ramírez es importante, mas no es extensa. Solamente aparece en dos segmentos de la película y apenas tiene una línea de diálogo (cosa que por cierto es normal en los asesinos, recuerden a Clive Owen y sus dolores de cabeza en la primera parte, o a Karl Urban en la segunda). Me dió la impresión -- y esto es algo que me obligará a volver a ver esta película -- de que Ramírez y Damon nunca comparten escena. No recuerdo ni un solo plano donde salgan los dos a la vez, pero pudiera estar equivocado. En cualquier caso, hay que darle un aplauso a Ramírez por haber llegado tan lejos y esperemos que esta participación no sea sino la llave que le abra muchas más puertas en Hollywood (o Europa, o Bollywood, o a donde quiera que sea que lo lleve el destino)