"El cine nacional se está consolidando". Entrevista a Lorena Almarza.

Desde su creación en el 2006, la Villa del Cine, una entidad con rango de fundación adscrita al Ministerio del Poder Popular para la Cultura, ha dado mucho que hablar en el medio cinematográfico. La institución es un organismo del Estado creado para el fomento de la industria cinematográfica venezolana, una productora estatal que forma parte de la llamada Plataforma del Cine y el Audiovisual, la cual incluye además la Fundación Cinemateca Nacional, la Fundación Distribuidora Nacional de Cine Amazonia Films y el Centro Nacional Autónomo de Cinematografía (CNAC). Lorena Almarza, presidenta de la Villa del Cine, tuvo la amabilidad de concedernos una entrevista y de responder algunas de nuestras preguntas.

Antes de entrar de lleno a lo que nos ocupa y para que tengan una idea de quién es nuestra entrevistada, me permito extraer parte de la entrevista que en su oportunidad le hiciera la revista ENcontrARTE a Lorena Almarza " (...) estudió Psicología Social en la Universidad Central de Venezuela. Trabajó durante varios años en el barrio José Félix Ribas de la populosa zona de Petare de la ciudad de Caracas, en un proyecto que consistía en usar la cultura como elemento para lograr la organización social de la comunidad y como actividad preventiva del delito y la drogadicción, realizando actividades con niños, adolescentes y núcleos familiares. Trabajó en el Proyecto “Cine en las Escuelas Bolivarianas”. Ha sido Directora General de Cine y Medios Audiovisuales del CONAC y anteriormente llevó la Coordinación General de este mismo departamento (...)".

Con esto dicho, les dejo con las preguntas y las respuestas de la entrevista.

¿ Por qué era necesaria la creación de una Villa del Cine en Venezuela?

La Villa del Cine, el CNAC, la Cinemateca Nacional y Amazonia Films, constituyen estrategias en el desarrollo de una política de estado que busca dar plenas garantías al pueblo venezolano de contar con espacios y regulaciones que hagan posible la creación, protección y divulgación de obras cinematográficas nacionales.

El desarrollo de la productora del estado se articula con el fortalecimiento del CNAC a partir de la Reforma Parcial de la Ley de Cinematografía, cuya búsqueda es la protección de la creación, producción, exhibición de la producción nacional independiente, de la creación de redes de exhibición en diversas capitales del país y en espacios comunitarios liderados por la Cinemateca Nacional y el nacimiento de Amazonia Films, Distribuidora Nacional de Películas, que busca avanzar en la adquisición de obras para lograr diversificar la pantalla venezolana y a su vez servir de espacio a obras y autores nacionales para su comercialización dentro y fuera del territorio venezolano.

La Villa del Cine busca fomentar la producción desde el estado, de aquellas obras que pueden no ser del interés de un autor o productor independiente ni del mercado, y a su vez, plantea la posibilidad de consolidar una infraestructura física y tecnológica que pueda ser puesta al servicio de autores o productores independientes.

¿En qué se diferencia la Villa de una empresa productora de carácter privado?

Fundamentalmente en el tipo de obras que nos interesan producir. La Villa del Cine es una institución del estado, adscrita al Ministerio del Poder Popular para la Cultura, por lo tanto, su decisión para producir emana de los intereses del estado dispuestos en la Constitución de la República Bolivariana, así como de las líneas estratégicas que disponga el Ejecutivo Nacional, son estas, en términos de contenido, lo que da pie al desarrollo de una programación anual de producción. A su vez, buscamos establecer un sistema de producción que de lugar a la inclusión de creadores noveles y de trayectoria en diferentes áreas, no sólo en la dirección sino en cada uno de los espacios creativos, técnicos y de oficios necesarios para lograr una película.

¿Crees que se está dando un despertar del cine venezolano?

El cine nacional se está consolidando, creo que comienzan a sentirse los efectos de una política de estado sostenida. El despertar del cine venezolano requiere del compromiso del estado en generar y mantener los espacios para incentivar y garantizar la producción, es esa la tarea de quiénes hoy ocupamos cargos públicos y más aún de un gobierno que cree firmemente en la recuperación de la soberanía nacional. La transformación cultural requiere de tiempo, de trabajo sostenido y de acciones no rígidas. En el caso de la creación, la generación de conceptos, de propuestas éticas y estéticas desde el lenguaje audiovisual, dependen sólo de quiénes hacen cine, son los creadores los llamados a participar activamente. En estos últimos años hemos visto un crecimiento importante en estrenos de obras venezolanas en circuitos comerciales y otras cientas de obras de calidad a través de la Cinemateca Nacional, las cuales lamentablemente no se cuentan en las estadísticas formales, cosa que a mi juicio debemos transformar, pues la Cinemateca cumple un importante papel en la divulgación de obras de calidad y en la formación de nuevos espectadores. Son muchos los que hoy día están produciendo y que a su vez, al término de un proyecto tienen la posibilidad de iniciar otro, la continuidad es un gran logro, pues garantiza el desarrollo del oficio, y estoy segura de que progresivamente, dará paso al surgimiento de propuestas más arriesgadas que a su vez, convoquen cada día más público a las salas.

Hay quienes sostienen que la Villa del Cine es excluyente, que los proyectos que más reciben apoyo son aquellos que siguen la línea política de pensamiento gubernamental. ¿Qué opinas al respecto?

En principio sería bueno saber quiénes lo opinan y sobre cuáles bases construyen sus argumentos. En lo personal, no respondo anónimos, y con todo respeto, no estoy a favor de la vocería de inquietudes anónimas, pues en nada ayudan en la construcción de espacios para debatir y construir. Valdría la pena saber cuáles son los proyectos que hemos apoyado y supuestamente cuáles no. Necesariamente debo saber que significa apoyar proyectos, pues La Villa del Cine es una productora, no un ente de financiamiento.

Nosotros mantenemos una política de puertas abiertas en todas las áreas, son muchas y muchos los directores que han sido convocados a La Villa del Cine, así como técnicos, actores y actrices. Durante 2007 produjimos 14 largometrajes donde contamos con Luís Alberto Lamata de gran trayectoria pero también están Alfredo Hueck, Hernán Jabes, Andrea Herrera, Carlos Caridad, Efterpi Charalambidis, entre otros, como nuevos directores, pero también, Antonio García, quien con larga experiencia en fotografía en el área de publicidad, realiza la Dirección de Fotografía de La Clase y de Un, Dos, Tres Mujeres seguidamente, Eleazar X realiza el sonido para La Clase y luego para Libertador Morales El Justiciero, podría mencionarte una larga lista. Están también las convocatorias públicas que hemos realizado, una acción de mucha importancia, pues hemos encontrado personas con gran talento para la escritura que anteriormente no contaban con espacios para desarrollar el oficio, a quiénes además, hemos apoyado en su formación como guionistas a través de asesorías individuales y grupales de profesionales como Frank Baíz y Gustavo Michelena.

Una parte del público venezolano disfruta y agradece la producción de películas como Miranda Regresa. La otra parte acusa a la villa de hacer propaganda política. ¿Cuál es tu posición como presidenta de la institución?

Si en Miranda Regresa hubiese un diálogo en el cual alguno de los personajes nos dijera que en 200 años vendrá un gobierno bolivariano, entonces definitivamente vale un enjuiciamiento y quizás cárcel… El veredicto para los productores podría plantear: lesión al patrimonio público por dotar a X personaje de capacidad adivinatoria, cuando tras investigaciones históricas no existe verificación de que así hubiese sido… Quiénes hablan de propaganda política o bien no vieron Miranda o La Clase, creo que estos comentarios más que críticas cinematográficas constituyen expresiones de prejuicio frente a contribuciones concretas en el espacio de creación desde una política de estado. Creo que deben verlas y revisar la crítica de Alfonso Molina sobre Miranda Regresa y la crítica de Pablo Gamba sobre La Clase. Ese porcentaje que refieres que “acusa a La Villa de hacer propaganda política” debe también hacer el esfuerzo por quitarse los prejuicios y valorar las obras desde su aporte en términos de lenguaje, actuación, puesta en escena, arte, música, a saber, desde los elementos expresivos que nos muestra.

Muchos jóvenes queremos hacer cine. Además de las convocatorias que la Villa realiza, ¿cuál es el proceso, digamos regular, para proponer un proyecto?

En nuestra página web está publicado un enlace denominado Presentación de Proyectos, en el cual se establecen los requisitos necesarios que deben presentarse para la producción o co-producción.

¿Está la Villa del Cine abierta a cualquier tipo de género cinematográfico?

Hasta ahora nunca se ha planteado trabajar sobre un solo género, sería absurdo. El 2008 será el año para mostrar la diversidad de temas, géneros y propuestas que logramos producir en 2007, de hecho en nuestra página web podrás encontrar información sobre cada uno de los proyectos que hemos realizado.

¿Qué planes y proyectos tiene la Villa del Cine para el 2008?

Culminar la post-producción de 11 largometrajes y canalizar sus respectivos estrenos, rodar, post-producir y estrenar Zamora, estrenar la serie de Miranda Regresa y avanzar en la producción de al menos 8 obras, así como dar continuidad a la Convocatoria de Ideas para Desarrollo de Guiones. Nos gustaría este año poder avanzar en la construcción de las áreas de talleres, pues es vital el crecimiento en artes y oficios y también diseñar el proyecto de expansión de La Villa hacia las regiones a través de programas de unidades de producción, impulsando de esta manera la producción en las regiones.

¿Cuál es la posición de la Villa del Cine frente a la piratería?

Creo que el problema no es la piratería, esta es en realidad, a mi juicio una consecuencia de la visión que ha imperado sobre la Distribución, en la cual, se privilegia la circulación de un solo tipo de cine, pervirtiendo y negando la diversidad de producciones y propuestas que existen y reduciendo la posibilidad de que los pueblos tengan acceso a conocer otras cinematografías. La visión monopólica distribución-exhibición, niega bajo criterios eminentemente económicos, el derecho a la expresión artística de los creadores y el derecho de los ciudadanos a conocer desde el arte otras culturas.

¿Crees que las diversas figuras del cine internacional que se han acercado a la institución que diriges, lo hacen más por razones culturales, políticas, o económicas, o todas ellas?

La Villa del Cine como proyecto puede despertar grandes intereses en todas aquellas personas relacionadas la mundo de la producción. La existencia de La Villa abre una posibilidad para quiénes ya han producido pero también para los que quieren hacer cine. Es hoy día además, la única productora de estado que existe en la región, la cual, en breve tiempo ha logrado edificar una infraestructura dedicada exclusivamente a la producción, un equipamiento progresivo de alta tecnología, ha realizado 14 largometrajes en un año fiscal; y logrado estrenar 4, y a su vez, para producirlos ha mantenido una convocatoria amplia, dando lugar a un espacio donde personas con trayectoria -y en formación, provenientes de la Tv, el cine, el teatro y otras áreas, confluyan. Así como se han acercado figuras del cine internacional también hemos tenido la oportunidad de intercambiar con figuras y personalidades del cine nacional, que no necesariamente han producido hasta ahora con nosotros, y la motivación siempre ha sido conocer lo que hacemos, la manera en que se realizan nuestras acciones e indagar en las posibilidades de ser participes de este proyecto. Estoy segura de que si pudiéramos contar con Enio Morricone en la propuesta de banda sonora para alguna de nuestras producciones ni el maestro Francisco Cabrujas ni Chuchito Sanoja se opondrían, pues La Villa del Cine, puede ser un referente importante de Venezuela en el mundo.

Danny Glover, Kevin Spacey y Sean Penn, reconocidas figuras en el cine vienen a Venezuela por estar interesados en el proceso político que se está gestando, en el cual sus principales banderas son el antiimperialistmo, la autodeterminación de los pueblos, la reivindicación de la diversidad cultural y la soberanía, y en el marco de estas políticas está La Villa del Cine, pues somos el Gobierno Bolivariano. Además de actores, son activistas políticos contra la guerra de Irak y la ocupación, participan en movimientos sociales importantes como el Trans African Forum (Glover) e incluso en el caso de Spacey, tiene una productora llamada Tigerstreet, a través de la cual propone incentivar la escritura de noveles guionistas. Cuando Spacey nos visitó, expresó su entusiasmo por lo que se hace en La Villa del Cine, y en su entrevista con el Presidente de la República Bolivariana de Venezuela, Hugo Chávez, comentó que debería existir una Villa del Cine en cada lugar del mundo.

¿Qué consejo nos das a aquellos que queremos hacer cine?

Difícilmente podría dar un consejo, creo que La Villa del Cine puede ser un espacio para que aquellos que quieran conocer o hacer cine tengan la oportunidad de intercambiar experiencias con quiénes tienen largos años dedicados a este oficio o quiénes se están iniciando. En este sentido sólo podría invitarlos a visitar La Villa, a conocer su funcionamiento y encontrar aquí, o a través de nosotros, posibilidades para el desarrollo de sus potencialidades creativas.


Entrevista a Lorena Almarza. ENcontrARte.

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