El segundo largometraje de Carlos Malave (Por un Polvo) es una experiencia agridulce porque no termina de alcanzar eso que prometía en el trailer. La premisa tampoco era muy original, sin embargo siempre hay una manera de contar la misma historia para hacerla entretenida, emocionante y nueva.
Y ese es el primer, y quizás único problema, que tengo con la película: que la historia ya se ha contado en infinidad de ocasiones y de mejor manera (véase: 8mm, Man on Fire o Taken sólo por citar tres ejemplos recientes y relativamente exitosos que guardan alguna relación temática con la película de Malavé).
Ojo, esto no va en detrimento del esfuerzo de hacer la película de una manera independiente y con un presupuesto ínfimo, en estilo "guerrilla" como muchas veces ha dicho el mismo Malave. Por el contrario, aplaudo que haya una corriente, aún agreste eso si, de hacer otro tipo de cine; de intentar contar historias sin estar bajo el yugo de la financiación estatal.
Pero el problema es que a pesar de que película se rodó siguiendo los lineamientos del estilo de cine guerrilla, al parecer el guión fue redactado de esa misma manera. Y es allí donde veo el mayor punto débil de la película.
Sólo por poner un ejemplo: el personaje que interpreta Jean Paul Leroux, Pedro Ramírez, es un policía que no logró resolver el caso de un secuestro que terminó en el asesinato de la victima, esto lo lleva a convertirse en una persona inestable y con problemas emocionales que afectan su mismo desempeño como policía, su relación con su esposa, etc.
Pero nunca llegamos a ver nada de esto, ni siquiera sugerido. Ramírez es una bomba de tiempo pero nunca percibimos ese peligro realmente. Por eso cuando su hija es secuestrada y luego se descubre un video donde aparentemente es abusada sexualmente las reacciones de Pedro son cuando mucho caricaturescas. Y no creo que el problema sea la actuación de Leroux, el problema es la pobre construcción del personaje.
El otro punto debil de la película es evidentemente el entorno en que se desarrolla. La elección de el formato de video digital, las camaras en mano estilo "documental" y en general ese feel de cine de bajo presupuesto tienen un gran acierto en otorgar casi siempre un sentido de inmediatez y realidad que a veces ni siquiera las películas con alto presupuesto pueden replicar, ese es uno de sus atractivos. Pero en Las Caras del Diablo es un tanto contradictorio, porque esa "realidad" que captura Malave no tiene nada que ver con la realidad de los cuerpos policiales venezolanos.
Yo esperaba que precisamente por ser una producción independiente la visión de los cuerpos de seguridad fuese un poco más crítica, sin llegar al ataque directo. Pero no, se nos pinta una policía donde no hay corruptos ni nada semejante a lo que todos conocemos es el día a día de nuestros cuerpos de seguridad. Entonces, ¿esa omisión es sencillamente un exceso de ingenuidad o una estrategia para quedar bien con Dios y con el Diablo? Creo que eso le resto inmensamente a la película.
Finalmente el tramo final es casi incomprensible con algunos giros de trama mas cercanos a la telenovela que al cine policial propiamente dicho o fueron tratados con tanta torpeza que lo que debería haber sido sorpresivo e impactante, termino siendo risible y poco creíble, como dije antes creo que todo viene del guión.
Y finalmente esta el tema del abuso infantil. Yo se (no con seguridad, pero me lo imagino vamos) que la intención de Malave es que el mayor numero de personas vea su película y por eso podría entender que el tema de la pederastia y el abuso infantil sea un tema delicado para tratar, en cualquier medio no solo en el cine; pero de ahí a tocarlo solo de pasada o no mostrarlo con la honestidad que amerita me pareció bastante triste.
Ojo!, yo no esperaba que la película se regodeara en este tema en particular pero si que dijera algo al respecto. Mencioné antes otras películas con una clara vocación comercial que entre las cosas que hicieron bien fue mostrar esto que digo. Además, en el terreno del cine actual donde hay películas tan valientes como ésta, me parece que a Las Caras del Diablo le faltó algo de esa valentía.
Creo que Por un Polvo (2008) es mejor película que esta, en aquella por lo menos había algo de autenticidad en el personaje también interpretado por Leroux, que imagino fue construido en gran parte por las propias experiencias de Malavé como cineasta. Incluso la puesta en escena de aquella película se veía mejor planificada y los personajes estaban mejor definidos, y que coño! eran mas interesantes.
A pesar de lo negativo que pueda parecer mi apreciación de la película de Malave, creo que como cineasta todavía tiene bastante que mostrar, por lo menos la intención de tratar cosas nuevas está ahí y eso es siempre necesario.
Esperamos entonces por sus otras dos películas: La pura Mentira y el largometraje sobre el periodista de sucesos Heberto Camacho, que si mal no recuerdo se llama "El último Cuerpo".
Y si Carlos Malavé lee esto: Pana lánzate una secuela, por que no retomar la historia de Pedro en Las Caras del Diablo 2.
Hola, saludos! soy estudiante en una Maestria de Derecho. estamos estudiando el aspecto filosofico del actor, dentro de la pelicula. De cierto modo, no muestran la verdad de la verdadera policia corrupta, y de los maltratos crueles y humillantes. quedaron varios vacios e interrogante, con respecto a si la esposa le fue infiel y si ese fue el motivo del rapto. fue como especie de una ensalada donde le desean agregar distintas especie. Por otro lado si llega el mensaje. Y es de vigilar mas a los hijos con este medio practico del internet.
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