Por Sergio Marcano.
5.13 PM.
Llego a la sala temprano para comprar las entradas.
Hay una cola kilométrica de “teenagers” sifrinos que quieren ver el blockbuster gringo del momento.
Me armo de paciencia ya que hay sólo dos cajas abiertas de las 5 que conforman la taquilla.
5.22 PM.
5.34 PM.
5.43 PM.
5.59 PM.
Finalmente llego a la taquilla.
YO
Buenas, me das 4 entradas para
ver “Swing con song”
TAQUILLERA
Sonríe nerviosa.
Mira, pero esa es un documental…
YO
Si, si, dame 4 entradas por favor…
La taquillera parece decepcionarse porque no sigo su consejo.
TAQUILLERA
Ok. Son ochenta y ocho mil bolívares.
YO
Sorprendido por el costo de la entradas.
¿Cuánto cuestan las entradas?
TAQUILLERA
Con desgano.
22 dos mil cada una…
YO (OFF)
Coño la entrada subió de precio
otra vez…
TAQUILLERA
¿Cómo va a pagar?
YO
Efectivo.
La taquillera me mira con cara de “este pobre diablo al que le gusta el cine venezolano no debe tener ni tarjeta de débito”.
TAQUILLERA
De mala gana.
Y le agradezco por favor que me
pague con sencillo. Porque no
tengo nada de eso por aquí…
Me reviso los bolsillos.
YO
Bueno te voy a pagar con dos billetes
de 50 y te doy los 8 en sencillo,
¿Te sirve?
TAQUILLERA
Si, si. Pero le doy el dinero cuando
salga de la función…
Yo recuerdo que la última vez que hice lo mismo la taquillera ya no estaba en la taquilla cuando salí de la película y perdí mi dinero.
YO
No, no, yo prefiero esperar.
TAQUILLERA
Pues va a tener que esperar un
rato porque de verdad estoy sin
un billetico…
Asiento y me pongo a un lado de la taquilla, completamente resignado a la espera.
Todas las personas que se acercan a la taquilla me miran como si fuera un ladrón o un carterista.
Algunas mujeres encopetadas incluso se aguantan la cartera mirándome con desconfianza.
6.08 PM.
Mensaje de texto:
Ericka: estoy haciendo la cola de entrada a la sala.
Yo: Ok. Ya llego.
6.10 PM.
Le sonrío a la taquillera. Y me le acerco.
La gente que está en ese momento en la taquilla retrocede como si yo fuese un enfermo terminal de sífilis.
Los ignoro y le pregunto a la taquillera.
YO
Hey. ¿Aún no tienes efectivo?
TAQUILLERA
Seca.
No.
6.15 PM.
YO (OFF)
¿No sería el deber de esta cajera
tener sencillo para que la gente
que venga a la sala no tenga que
pasar por esto?
6.20 PM.
YO (OFF)
¿Sonaría un árbol que se cae en el
bosque si no hay nadie para escucharlo?
6.25 PM.
YO (OFF)
Coño ya está bien de espera ¿No…?
Me acerco de nuevo a la taquilla.
Y le pregunto a la taquillera tratando de ser amable.
YO
Hey. Mi película está por entrar…
¿Ya tienes mi dinero?
La cajera me mira con cara de desprecio.
Y junta dos monedas de mil y un billete de 10 mil.
Tenga Sr.
Miro el vuelto extrañado y cuento el dinero.
YO
Si pero, recuerdas que yo te di
los ocho mil sencillo, es decir,
me tienes que dar 20 mil de vuelto.
TAQUILLERA
No señor. Ese es su cambio exacto.
YO
Srta…
La taquillera pierde la paciencia y me grita.
TAQUILLERA
Por favor Sr. no me moleste que
tengo que atender a estas personas.
La miras en silencio.
YO (OFF)
Brother, cool down. No vas a pelear
por 8 mil bolívares…
Me retiro del lugar.
Respiro profundo 1, 2, 3, 4, 5…
Exhalo 6, 7, 8, 9, 10…
Me juro a mi mismo que nunca más pagare con sencillo en una sala de exhibición nacional.
6.27 PM.
Me acerco a Ericka y le doy las entradas para todos.
YO
¿Quieres algo? Voy a comprar algo
de tomar…
ERICKA
No quiero nada. Sigo a dieta. ¿Te
pasa algo?
YO
No, no. Nada. Ya regreso.
Me acerco a la caramelería y hago una cola kilométrica, ya que a pesar de que hay 7 cajas, hay sólo 2 cajeros atendiendo a la multitud.
YO (OFF)
Molesto.
¿Para qué coño tienen todas estas
cajas?
Tratando de calmarme.
YO
Por favor… Ya.
6.55 PM.
Inhalo 61, 62, 63, 64, 65, 66…
Exhalo 68, 69, 70, 71, 72, 73…
Mensaje de texto:
Ericka: Ya dieron sala.
Yo: Ok. Guárdame un puesto. Ya llego.
7.01 PM.
7.02 PM.
7.03 PM.
7.04 PM.
7.05 PM.
Miro los precios de lo que quiero comprar: un agua 4000 bs.
Y una cotufa pequeña 4000.
YO
Por favor me da un agua y una
cotufa pequeña.
CAJERO
No tenemos cotufas pequeñas…
YO
Dame una mediana.
CAJERO
Tampoco tenemos medianas…
YO
Hastiado.
Bueno, entonces dame una grande.
Casi entre los dientes.
¿Acaso tengo otra opción?
Miro el precio en el afiche: COTUFA GRANDE: 7 mil bolívares.
Saco de mi bolsillo el dinero exacto: 11 mil bolívares.
El cajero va y busca el agua y llena una caja grande de cotufas.
Toco el pote de agua. Está caliente.
YO
¿Amigo por favor no tiene un agua
más fría?
El cajero me mira con una mezcla de condescendencia, aburrimiento y desprecio. Busca otra agua, que está exactamente de la misma temperatura que la anterior.
YO
Pana, está igual de caliente, ¿Me
regalas un vaso con hielo?
CAJERO
No se puede sr.
YO (OFF)
Me encanta este lugar…
Le entrego el dinero.
CAJERO
Sr. Faltan dos mil bolívares.
YO
¿Cómo que faltan dos mil bolívares?
CAJERO
El agua cuesta 5000 bs y la cotufa
grande 8000. Eso suma catorce mil
bolívares y usted me dio sólo once
mil. Mire.
Me enseña el billete de diez y la moneda de mil.
Yo le señalo el cartel de los precios.
YO
Allá dice agua: 4000 y cotufa
grande: 7000. Lo que suma once mil
bolívares exactos.
CAJERO
Si pero los precios cambiaron esta
tarde en la caja y aún no los hemos
cambiado en el afiche…
YO
¿Cómo que no los han cambiado en el
afiche? Primero los cambias en el
afiche y luego los cambias en la caja registradora…
El cajero levanta los hombros.
CAJERO
¿Quiere hablar con el gerente?
Una mujer con sobrepeso que está justo atrás de mi habla con voz alta y chillona.
MUJER
Ay miamor ¿Tu no vas a peliar nunca
por dos mil bolívares verdad?
Si las miradas asesinaran el cajero y la mujer con sobrepeso caerían fulminados en ese momento.
CAJERO
¿Va a querer las cosas o no?
Parpadeo dos veces.
Tengo sed.
No tengo otra alternativa.
Saco un billete de 20 mil y se lo entrego al cajero.
El cajero me devuelve los 11 mil bolívares que le entregue antes y toma el otro billete.
CAJERO
Pero no tengo sencillo Sr. Le
doy el vuelto cuando salga de
la función.
Suspiro profundo y acepto a regañadientes.
El cajero escribe la cantidad de dinero que me tiene que dar de vuelto en la parte de atrás de la factura.
Recojo la factura y camino a la sala maldiciendo.
YO (OFF)
¡No vuelvo a comprar nada en estas
putas caramelerías!
Comienzo a contar una vez más:
Inhalo 1, 2, 3, 4, 5, 6…
Exhalo 7, 8, 9, 10, 11, 12, 13…
7.09 PM.
Entro a la sala.
Noto que en la sala hace calor.
Busco a Ericka y a los demás.
Abro el agua y me tomo unos sorbos.
Me acerco a ellos y me siento en la butaca que guardaron para mí.
La butaca –que está dañada- se echa completamente hacia atrás hasta dejarme casi acostado.
Buena parte de la botella de agua y de las cotufas se me caen encima.
Respiro profundo una vez más, cierro el agua, me sacudo las cotufas de encima y guardo resignación y silencio.
Todos me miran y se miran extrañados entre sí.
Las imágenes frente a mis ojos, me dicen que ahora hacer un comercial en video es mucho más barato.
Veo el comercial de ropa de hombre Workman’s, que es la máxima expresión de su elegancia.
El comercial de Gales que es el salón de fiesta para eventos inolvidables.
Me entero que Belén Marrero está viva y coleando, pues la veo haciendo publicidad a un campamento vacacional llamado las 5J, según ella dice: el secreto mejor guardado de Cojedes.
YO (OFF)
???.
Veo el comercial de las bodas colectivas en el Sambil.
RECIEN CASADO
Gracias Sambil. De corazón, gracias…
YO
¿Wtf?
Chávez nos dice a los presentes en la sala que en la UNEFA de 2.500 estudiantes pasaron a ser 230.000 porque ellos son un modelo de universidad socialista y popular.
Súper cable una conexión para no salir de tu hogar.
YO (OFF)
¿Cuántos comerciales ponen en este
lugar? ¿No basta con el dinero que
nos sacan con el costo de la entrada?
Dunas te espera con gran diversión en Valencia.
Epa:
SIMON DIAZ (CON VOZ DE ULTRATUMBA)
El hogar donde tú decides.
Epa, ayudando a construir hogares.
Revoluciona la manera de hacer publicidad contactando al 0212 620 76 20.
Continúan el comercial de la escuela de actuación de Karl Hoffman, el de Macdonald, una obra de teatro de Luis Fernández, el de Tang…
La luz de la proyección se apaga.
Me acomodo en el asiento y trato de relajarme para ver la película.
Comienzan los comerciales en 35 milímetros.
YO
…
Pasan el comercial de Cinesa.
El nuevo comercial de PDVSA. En el que una voz te asegura que ahora PDVSA es de todos…
YO (OFF)
Seguro…
Veo el comercial de polar light.
CHICO COMERCIAL
Uff ¡qué bella! Que me mire, por
favor que me mire…
El comercial de solera light.
El comercial de whisky en el que se sugiere que el hombre burgués moderno tiene que ser un caballero.
YO (OFF)
¡Coñoqueladilla!, ¿Hasta cuándo
va a seguir esta vaina?
Pasan el comercial de la piratería.
CHICO COMERCIAL
Me saque un 20 súper pirata, como
tu película
YO (OFF)
¡Dios mío! Qué estupidez…
VOZ ALECCIONADORA (OFF)
¿Qué le estas enseñando a tus hijos?
Un tipo detrás de mi grita en medio de la sala.
TIPO DETRÁS DE MI
¡A ahorrar!
La gente se ríe en la sala.
A pesar de la calentera me río yo también.
Pasan el trailer de Harrypotternosequenumeroytampocomeimporta.
El trailer de 2 películas de terror serie b hechas para teenagers descerebrados y sin expectativas de ser verdaderamente sorprendidos.
Pasan una cuña en donde te explicitan todas las formulas narrativas clichés que se repiten película tras película en el cine hollywoodense y se te sugieren que la verdadera razón por la que estas en la sala en ese momento es para comprar cotufas y tomar refrescos.
YO
¡NOMEJODAS!
Ericka a mi lado se ríe, me quita unas cotufas y se las come.
Comienza el comercial de pepsicola, ese que antes de que el sonido surround de la sala se echara perder, te permitía enterarte de lo que era el sonido envolvente.
Noto que el sonido de la sala ahora sólo viene de detrás de la pantalla, y además está muy alto y satura.
7.35 PM.
Comienza la película.
YO
¿No hay aire acondicionado?
ERICKA
Si vale… ¿Cómo no va a haber?
7.39 PM.
La sala es un hervidero.
Es un hecho que el aire acondicionado no funciona.
El sonido sigue alto y saturando, la película se oye mal.
Se escuchan mejor las explosiones del blockbuster norteamericano que pasan en la sala del lado.
YO
¡Vámonos de esta vaina! La vemos
mejor cuando salga en pirata…
ERICKA Y LOS DEMAS
Si, si…
7.46 PM.
Salimos de la sala en fila india.
A regañadientes nos devuelven el dinero de la entrada.
Me siento aliviado mientras me alejo del lugar.
YO
¡Coño!
Se me olvidó reclamar el dinero en la caramelería.
No me devuelvo.
8.30 PM.
En una arepera, con los reales de las entradas, nos comemos unas reinas pepeadas.