Fuera de toda polémica, la nueva película de Lars Von Trier es una de las mas interesantes del año pasado. Interesante por lo curioso de su realización, su puesta en escena y los temas que maneja, todo ello analizado y contrastado en el contexto en que se estrena y con el trabajo anterior de su director.
Von Trier quien fuera uno de los principales pioneros de un nuevo tipo de cine que se revelaba contra todo lo "artificial y poco realista en que se había convertido el cine" gracias en gran parte al culto a lo cosmético y efectista del cine industrial estadounidense.
En todo caso Von Trier, junto con Thomas Vinterberg, buscaba despersonalizar la realización cinematográfica con el manifiesto de Dogma 95, básicamente se intentaba conseguir un tipo de cine que no dependiera de los adelantos técnicos para la época (estamos hablando de 1995).
Pues bien desde ese entonces hasta el día de hoy Von Trier debe habérselo pensado mejor y decidió renunciar a ese manifiesto pues Antichrist hubiese sido imposible de realizar bajo esa propuesta o por lo menos el resultado, según creo yo, no hubiese tenido el mismo impacto que la película que tenemos ahora.
En primer lugar gracias a lo adelantado de la tecnología digital (la película se filmó con una cámara de vídeo digital de alta definición) las imágenes que logra capturar Von Trier son hasta cierto punto hiperrealistas. Sin embargo creo que a pesar de que podría considerarse que esta decisión es en detrimento del argumento (excesivamente sencillo, creo que es lo único que decidió conservar del Dogma 95) la verdad es que ayuda demasiado a desarrollar el tema de la misma que en mi opinión sencillamente es: el terror está en nosotros. El terror está dentro de nosotros.
Temáticamente la película me hizo recordar a otros largometrajes como La Noche de los Muertos Vivientes (George A. Romero, 1968), donde el conflicto viene precisamente de los personajes. Tal conflicto es acrecentado por las circunstancias de espacio y tiempo en las que se encuentran estos personajes.
Y con respecto a las escenas de violencia explícita que le han ganado a la película cierta polémica, puedo decir que están hechas con bastante elegancia, mostrando lo necesario. Muchas otras películas de terror actuales son mucho más generosas cuando se trata de mostrar sangre, este no es el caso.
En todo caso me atrevo a asegurar que es una de las películas más accesibles del director danés. Es como si Von Trier estuviese luchando por no ser Von Trier. De hecho es una película especialmente interesante de estudiar para aquellos que estamos interesados en el funcionamiento de una historia. Von Trier se ha sacado una película utilizando pocas locaciones y solo dos actores. En tiempos de crisis es algo a considerar.
Una coproducción de Dinamarca, Francia, Polonia, Alemani, Italia y Suecia
Dirigida y escrita por: Lars Von Trier
Cinematografía de Anthony Dod Mantle
Interpretes: Willem Dafoe y Charlotte Gainsbourg
Música: "'Lascia ch'io pianga' from 'Rinaldo'" de Georg Friedrich Händel
Hola Juan.
ResponderEliminarA mí me parece una película excelente.
Tal y como lo dices, es elegante. La secuencia con que abre es memorable.
A mí me gusta el trabajo de este pana... pero la verdad que si está tratando de no ser él, pues le quedó de pinga igual.
Me gustó lo del terror está dentro de nosotros. Con esa frase lo resumes todo.
Un abrazo.