A propósito de Bourne...(y Ludlum)

Gracias a Doug Ligman y Paul Greengrass cada vez que pensemos en Matt Damon pensaremos en Jason Bourne, en primer lugar por lo impecable de la ejecución de las películas (actuación, cinematografía, música, efectos especiales, acrobacias, etc.) y segundo porque las películas de agentes secretos, conspiraciones, agencias gubernamentales corruptas, etc parecen ser siempre de nuestro interés cinéfilo.

Sin embargo la cara de Jason Bourne no ha sido únicamente la de Matt Damon . El personaje de Robert Ludlum fue trasladado de las páginas a un medio audiovisual, la televisión específicamente, con anterioridad.

Por allá por el año 88 se adaptó la primera novela de la saga, The Bourne Identity, teniendo a Richard Chamberlain como un Jason Bourne menos proactivo que el que interpreta Matt Damon, sin embargo tal parece que ésta miniserie se apega más al texto de Ludlum.

Contrariamente a lo que parece ser en este momento, Robert Ludlum no ha contado con una difusión másiva como la de otros autores con un estilo similar, siendo el caso más paradigmático Ian Flemming y su agente 007.

De hecho antes de la trilogía de Bourne/Damon/Greengrass, sólo se habían hecho unas cuantas películas basadas en el trabajo de Ludlum, resaltando The Osterman Weekend, una película de intrigas (que otra cosa) que sería la última película de Sam Peckinpah.