martes, 23 de octubre de 2007

Believers, de una a video sin pasar por go



El pasado 16 de Octubre fue el lanzamiento en los Estados Unidos del DVD de Believers, la última película de Daniel Myrick. Como ya muchos de ustedes sabrán, Myrick dirigió junto a Eduardo Sánchez ese fenómeno del cine independiente llamado El Proyecto de la Bruja Blair (1999). Si no ha escuchado nada sobre Believers, no se sienta mal: la cosa pasó por debajo de la mesa. El filme saltó al video sin pasar por los cines.

Para empezar debo decir que Believers me ha revuelto la curiosidad: ¿por qué el nuevo trabajo de un director ganador en su oportunidad del SITGES y de Cannes no fue tomado en cuenta? ¿Por qué la película no fue llevada a la gran pantalla? En una entrevista que le hiciera Bloody-Disgusting.com, Myrick declaró que las razones por las que la cinta no fue al cine, son netamente creativas. Asegura en la entrevista que trabajar para un pequeño estudio le proporciona absoluta libertad a su trabajo. Y es que al parecer este director siempre ha sido firme en su posición en contra de la censura y las manipulaciones impuestas por los engranajes de los grandes estudios. En todo caso, la ausencia de Believers en las salas de teatro se siente, y la falta de apoyo financiero, sobre todo a nivel de publicidad, se nota a leguas. Y no es que nada de esto me sorprenda. Después de todo igual suerte corrió el mismísimo Eduardo Sánchez con su película Altered (2006).

La idea que da forma a Believers es bastante buena. La película trata de una secta, un grupúsculo de científicos y filósofos que han dado con una formula matemática que les permite saber el momento exacto del Apocalipsis. La trama fluctúa entre dos mundos: el de los creyentes y el de los incrédulos, y la cosa está armada con la intención de que la duda reine y se mantenga una tensión argumental en torno a la posibilidad de escapar o no al día final. Sin embargo, Myrick y su esposa (ambos escribieron el guión a cuatro manos) se pusieron ambiciosos. En mi opinión, lo que pudo ser un cortometraje asombroso, inteligente, ganador de premios y festivales, se convirtió en un largometraje harto deficiente.

El inicio de la película es sin duda prometedor. Pero a medida que corre la cinta, la cosa va muriendo. Para el final ya no hay nada que buscar y si la película no se va por el barranco de la decepción es porque Myrick salva la vaina a último minuto. Literalmente. Con el final Myrick no hace otra cosa que resucitar una película muerta. Believers falla en el meollo del asunto, el contenido, el nudo, pues después de la media hora inicial la historia no logra mantener al espectador sentado a gusto frente a la pantalla. La idea es tan simple, brillante y tan inevitablemente corta, que a Myrick no le queda otra que echarle baldes y baldes de agua para que rinda. De otra manera tendría que resolverla antes. Y a fuerza de no soltar pistas al espectador, de no dar respuestas, de aguantar la sorpresa, el suspenso se pierde, y la cosa se hace tediosa y redundante.

Sin embargo no todo es tan malo. La verdad las he visto peores y se han casado. La atmósfera del filme, la textura de la imagen y el contraste del color me parecen grandes aciertos. La cámara está muy pero muy bien (hay tomas súper interesantes) y la edición, aunque bastante técnica, resulta impecable. Quisiera decir lo mismo de las actuaciones, pero la mayoría son sobreactuadas, lo cual parece ser el punto débil de estas producciones de bajo presupuesto. El filme en general tiene un cierto aire televisivo, y el color parece haber sido tratado de alguna manera en post producción. Sin embargo no estoy seguro, quizás sea el formato utilizado, pero mi ojo no da para identificar si se trata de video envenenado o un HD sometido a una corrección intensa de color. Ya alguno de ustedes me dirá.

Para aquellos que quieran más información, aquí les dejó la página oficial de Believers. En todo caso traten de alquilarla de manera que sea de ustedes, la última palabra.

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